Historia Postal

Correo prefilatélico a los Estados Unidos

Correo prefilatélico de España a los Estados Unidos

España nunca tuvo ningún convenio postal directo con los Estados Unidos de América. Por este motivo, la correspondencia entre estos dos países debía ser tramitada a través de encaminadores o bien aprovechando los convenios postales de los correos de terceros países. Aunque a lo largo del siglo XIX se conocen ejemplos de diversas rutas postales a través de Cuba, Francia, Bélgica o Prusia, la vía más usada sin lugar a dudas fue la inglesa.

Este estudio describe distintos ejemplos de este tipo de correo, desde los más antiguos conocidos por el autor, de finales del siglo XVIII, hasta el principio de la época filatélica. Aunque los primeros sellos emitidos por España se remontan a 1850, el uso de sellos de correo para las cartas destinadas a los Estados Unidos no fue posible hasta ocho años más tarde. Esto sucedió con la entrada en vigor, el 1 de octubre de 1858, del convenio postal hispano británico que permitía el prepago en España de la correspondencia que utilizase el correo británico.

Correo depositado directamente en buques.

Los primeros ejemplos conocidos por el autor de cartas destinadas a los Estados Unidos se remontan a finales del siglo XVIII. No existe ninguna evidencia de que estas cartas fuesen circuladas a través del correo español. Lo más probable es que fuesen entregadas en mano a buques americanos anclados en puertos españoles. Esto es plausible para cartas originadas en ciudades portuarias con mucho comercio, como eran durante los siglos XVIII y XIX las ciudades de Málaga y Cádiz.

La más antigua de estas cartas está fechada en Cádiz el 31 de marzo de 1792 y dirigida a Newbury Port, una pequeña ciudad cerca de Boston. En el frente hay una indicación manuscrita del barco en el que fue llevada (Eleven Sons), asi como el nombre del capitán. Tras cruzar el océano Atlántico y llegar al puerto de Boston, la carta fue entregada al correo americano, que le estampó la marca de llegada a Boston, el fechador de 9 de junio y la tasa manuscrita de 20 centavos de dólar, que pagó el destinatario.



Algo más reciente es el segundo ejemplo. Una carta del cónsul americano en Málaga, Michael Murphy, dirigida a la misma firma comercial de Newbury Port, en la que les ofrece sus servicios como intermediario comercial para este puerto español. La carta está fechada el 15 de julio de 1793 en Málaga y probablemente fue entregada a un buque americano tal como indica la marca manuscrita, "al cuidado del capitán Prible". El buque llegó al puerto americano de Boston el 26 de septiembre, tal y como demuestran las dos marcas postales estampadas en negro al frente. La carta se tasó con 12 centavos de dólar.



Este tipo de correo utilizando encaminadores fue el más comunmente utilizado durante la primera mitad del siglo XIX. Un ejemplo interesante es esta tercera carta fechada en Alicante el 18 de junio de 1805. Está dirigida a una casa comercial de Newton, cerca de Boston. Probablemente, la ausencia de buques con destino a América en el puerto de Alicante, hizo que esta carta fuese encaminada por tierra fuera de valija hacia el puerto de Cádiz. Al dorso puede apreciarse una marca manuscrita de encaminamiento, que dice "recibida y reenviada por cuenta del señor Roberts, Cádiz 10 de julio de 1805".

La gran mayoría del comercio con los Estados Unidos se hacía a través de los puertos de Nueva York y Boston. La ley americana obligaba a todos los buques a entregar el correo en el primer puerto americano en que amarraban, por lo que es normal que la correspondencia lleve estampada las marcas de llegada de uno de estos dos puertos. Esta carta es una curiosa excepción, ya que lleva estampado en el frente el fechador de llegada del puerto de Norfolk, en el estado de Virginia.





El último ejemplo de este tipo de correo es la carta que se muestra en la figura inferior. Esta fechada en Málaga el 11 de noviembre de 1839 y proviene del extenso archivo de la casa Silas Peirce de Boston. En el frente se puede ver que la carta fue llevada hasta Nueva York por el vapor Elizabeth, asi como el fechador de llegada a Nueva York el 6 de enero de 1840. La marca SHIP se estampaba en todo el correo que llegaba a la ciudad proveniente de buques que no tenían un convenio postal con los Estados Unidos. A su llegada a Boston, la carta fue tasada con 20 centavos.



Correspondencia circulada por correo español.

La alternativa al uso de encaminadores era la de dejar la correspondencia en manos del correo español. Típicamente, las cartas eran encaminadas hacia Francia o Inglaterra, desde donde cruzaban el Atlántico con destino a América. Una tercera posibilidad era enviar la correspondencia en buques españoles hasta Cuba, desde donde se podían hacer llegar a los Estados Unidos en vapores americanos.

La siguiente carta es un ejemplo de esta ruta, aunque con la peculiaridad de que el trayecto transatlántico se hizo fuera de valija, es decir, en manos de un particular, cosa que estaba expresamente prohibida. La carta está fechada en el Ferrol el 15 de enero de 1845 y el mismo texto menciona que fue entregada a un particular para ser llevada hasta la Habana, donde se echaría al correo. Así fue, tal y como demuestra el fechador de la Habana de 25 de marzo de 1845. La carta lleva también un porteo manuscrito "6".







Un ejemplo de la vía francesa es la siguiente carta dirigida a Philadelphia. Fue echada al correo en Mahón, Menorca, el 26 de octubre de 1847 y encaminada hacia Francia, probablemente por Barcelona. En el frente se aprecia el fechador de Perpignan de 6 de noviembre de 1847 y al dorso pueden verse las marcas de tránsito de París, del 8 de noviembre, y del puerto de el Havre, del 10 de noviembre. Con toda probabilidad fue en este puerto donde se inició el viaje a través del Atlántico hasta el puerto de Nueva York. A la llegada a América, se le estampó en el frente el fechador del 24 de diciembre. Tal como se ha comentado, al correo que llegaba procedente de buques que no tenían un contrato postal se le estampaba la marca SHIP. El capitán del buque recibía además 2 centavos de dólar por cada carta. El porteo para una carta sencilla dentro del territorio americano era de 5 centavos, por lo que el destinatario tuvo que satisfacer un total de 7 centavos de dólar. Esa es por tanto la cifra de tasa que aparece en el fechador de llegada a Nueva York.



Las cartas circuladas por la ruta francesa o la de Cuba son escasas y resulta claro que la vía postal más utilizada para mandar correo desde España a los Estados Unidos fue la de Inglaterra. No sorprende por tanto que esta ruta postal sea también la más estudiada.

Hasta 1849, la correspondencia de Inglaterra a los Estados Unidos debía enviarse franca. El remitente pagaba el franqueo para el tramo transatlántico hasta el puerto de llegada. La correspondencia se entregaba entonces a las autoridades postales americanas que la trataban como no franca, y el destinatario debía abonar el porte correspondiente al tramo dentro del continente americano. Las cartas procedentes de España tenían que satisfacer, además, el porteo correspondiente al tramo hasta Inglaterra. El proceso se hacía habitualmente usando agentes encaminadores en Inglaterra, que recibían y abonaban la correspondencia proveniente de España y la reenviaban franca hacia América.

El primer convenio postal entre Inglaterra y Estados Unidos entró en vigor el 15 de febrero de 1849. A partir de esta fecha fue posible enviar la correspondencia no franca desde Inglaterra. La tarifa que se estableció era de 19 centavos por cada cuarto de onza hasta el puerto de destino. La siguiente carta es un ejemplo de la ruta inglesa durante este periodo. Se trata de una carta comercial dirigida a Silas Peirce y Compañía de Boston y originada en Málaga el 27 de enero de 1850. La carta lleva escritas las instrucciones "para ser reenviada por Messrs. Baring Bros y Compañía, Londres", así como indicaciones de encaminamiento "por Madrid y París". En la parte superior, se pueden leer las indicaciones "Por Royal Mail Steamer de Liverpool via Halifax". El frontal lo completa la marca del consulado de los Estados Unidos en Málaga, estampada en tinta azul.

La carta lleva el fechador de salida de Málaga del 27 de enero de 1850. Fue enviada por Madrid hacia la frontera francesa en Irún, y lleva fechador de entrada en Francia por San Juan de Luz el 1 de febrero de 1850. La carta llegó a Londres procedente de Francia el 5 de febrero como demuestra el fechador estampado en el reverso. Fue tasada con 10 peniques, correspondientes a una carta de menos de 1/4 de onza, que abonaron los agentes encaminadores Baring Bros y Compañía.

En este punto, se tacharon las instrucciones de encaminamiento, revelando el destino final de la carta en los Estados Unidos. Fue de nuevo echada al correo en Londres el 8 de febrero, no franca, y el correo la tasó con 19 centavos en tinta negra, correspondientes a la tarifa desde Inglaterra hasta puerto americano.

El correo americano se hizo cargo de la carta en Boston y corrigió el porteo, añadiendo otros 5 centavos de tasa correspondientes a la tarifa de una carta de hasta 1/4 de onza dentro del territorio americano. El destinatario, por tanto, tuvo que abonar 24 centavos de dólar en total, tal como demuestra la tasa manuscrita en el frontal.



Un ejemplo ligeramente distinto de este periodo lo constituye la siguiente carta, fechada en Vigo el 16 de octubre de 1849. La carta circuló fuera de valija hasta Inglaterra, donde se depositó en el correo. A diferencia de la carta descrita anteriormente, el encaminador abonó el franqueo correspondiente al tramo transatlántico (19 centavos), por lo que la carta recibió la marca PAID, así como el fechador circular PAID AH y la marca de crédito 5 CENTS, ambas en rojo. Allí le fue aplicada también la marca de Leadenhall St. (Londres) en azul, siendo enviada la carta con destino a los Estados Unidos. A su llegada al puerto de Boston fue entregada al correo americano, siendo tratada a partir de ese momento como una carta no franca. El destinatario tuvo que abonar los cinco centavos con los que se tasó en Inglaterra.



La siguiente carta es un ejemplo tardío del uso de encaminadores en Inglaterra, en noviembre de 1855. Esta fechada en Málaga el 13 de noviembre de 1855 y dirigida a los encaminadores Baring Brothers en Londres. En el frente lleva el fechador tipo I de Málaga en tinta azul. Al dorso lleva marcas de tránsito de París y de Calais, ambas del 21 de noviembre de 1855, así como el fechador de llegada inglés del 22 de noviembre. Una vez entregada en Londres, el encaminador abonó el porteo de 10 peniques (sobre el fechador de Boston), le aplicó su sello en el frente y tachó las indicaciones "Vía Madrid y París", "London" y "para Baring Bros y Cia.", revelando así las señas del destinatario en Boston.

Una vez depositada de nuevo al correo, la carta recibió el fechador de cruz de Malta del 23 de noviembre y la marca de crédito de 19 CENTS para el porteo transatlántico de una carta de menos de un cuarto de onza. A la llegada a Boston se le estampó el fechador de llegada circular del 6 de diciembre de 1855, que también incluía el porteo corregido a 24 centavos, para incluir los cinco centavos del porteo interior americano.



El uso de encaminadores ingleses para dar curso a la correspondencia desde España a los Estados Unidos se prolongó hasta finales de 1858, cuando la entrada en vigor del primer convenio postal entre España y el Reino Unido posibilitó el uso de sellos para el prepago de la correspondencia circulada por medio de los correos ingleses.

Jaume Balsells, Noviembre de 2005.